Fundador y evolución del Opus Dei
El 2 de octubre de 1928, el sacerdote aragonés Josemaría Escrivá de Balaguer fundó el Opus Dei en Madrid, con el objetivo de promover un mensaje de santidad y apostolado en la vida cotidiana de los cristianos.
VIVIENDO LA FE
Leyton Marcillo y Edison Rodriguez
10/3/20241 min read
El 2 de octubre de 1928, el sacerdote aragonés Josemaría Escrivá de Balaguer fundó el Opus Dei en Madrid, con el objetivo de promover un mensaje de santidad y apostolado en la vida cotidiana de los cristianos. Atraído por la idea de buscar la plenitud cristiana en el mundo, Escrivá comenzó a dirigir a un grupo de jóvenes, inicialmente hombres, y más tarde también mujeres, a quienes guió espiritualmente.
En 1939, Escrivá publicó "Camino", un libro de aforismos espirituales que se convirtió en un referente para muchos y ha sido traducido a más de 50 idiomas, con una difusión de aproximadamente cinco millones de ejemplares. La primera ordenación sacerdotal de miembros del Opus Dei se realizó en 1944, marcando un hito importante en su desarrollo.
A partir de la Segunda Guerra Mundial, el Opus Dei se expandió por Europa y América, y desde finales de los años cincuenta también por Asia, África y Oceanía. Sus miembros han impulsado iniciativas educativas y asistenciales, destacándose por su impacto social positivo en países como el Congo y Filipinas.
En 1982, el Opus Dei se convirtió en una prelatura personal, lo que le permitió desempeñar un papel específico dentro de la Iglesia católica. Actualmente, cuenta con alrededor de 90,000 fieles de diversos estratos sociales, principalmente de clase media y media baja. La sede central se encuentra en Roma, donde también está la iglesia prelaticia de Santa María de la Paz, donde reposan los restos de Escrivá, quien fue canonizado en 2002 por Juan Pablo II.
El Opus Dei sigue siendo un movimiento influyente, con un enfoque en la formación espiritual y apostólica, así como en la promoción de la santidad en la vida profesional y personal de sus miembros.